LA GASTRONOMÍA ALTEANA
Altea es un pueblo costero con muchos años de tradición pesquera. Desde sus inicios Altea ha sido un pueblo que ha subsistido a base de hortalizas y pescado. Todo lo que la tierra y el mar han proporcionado y las personas han sabido aprovechar.
Por ello, la gastronomía alteana se basa en el pescado, el marisco y la hortaliza para la elaboración de sus platos más típicos.
En todas las casas de la Villa donde aún vive gente mayor, o son descendientes de antepasados que se asentaron en Altea, es típico tener un “recetario” aunque sea de memoria de los platos que las “abuelas” han cocinado siempre para la hora de comer.
Entre los más típicos encontramos el “arròs amb fessols ” o “l’arròs amb fessols i polp”(son arroces con abichuelas), dependiendo de la zona donde los antepasados vivieron, mar o huerta” es normal encontrarte estos dos tipos de arroz, que son idénticos pero cambia que en vez de haber pulpo haya variedad de verduras.
Las paellas también es un arroz muy típico en Altea. En muchas casas la paella es todo un rito un domingo a medio día. Se junta la familia o amigos y se organiza una pequeña fiesta, que consta de un vermú o “picaeta” mientras se hace tiempo para esperar la sabrosa paella. Luego se come alrededor de la misma en el mismo recipiente.
Las diferentes paellas y arroces:
La paella mixta (a la que se suele poner carne de conejo y/ o pollo) que lleva verdura y carne principalmente y ahora ya es muy típico verla con marisco también. Antiguamente no se ponía marisco porque no era accesible ni por la economía de la época ni por facilidad de conseguirlo. Lo normal era poner pimiento rojo y otras variedades de verdura según temporada.
La “paella d’aladroc”, paella de boquerón, es una paella muy famosa en este bonito pueblo. Es una paella muy sabrosa con apenas ingredientes (coliflor, boquerón, alcachofa y habas), esta es una paella típica en la temporada de invierno, donde los ingredientes son fáciles de encontrar frescos y de temporada. Aunque cambiando alguna verdura por otra es fácil encontrarla en cualquier mes del año.
L’arròs amb ceba, arroz con cebolla, es también un arroz que en las casas es muy normal encontrar cualquier día del año. Es una arroz sencillo y que con cebolla y pimiento consigue un sabor exquisito. Puede llevar también algún pescado azul para dar más sabor al plato.
Un arroz muy apreciado por los más exquisitos paladares es el arroz con bogavante. Con un sabor inigualable y una elaboración muy cuidada. Es un arroz que se come durante todo el año.
Luego encontramos arroces como el caldero marinero (receta de los marineros que iban embarcados varios días), el arroz a banda, l’arròs amb peix (arroz con pescado)…
Hay tantos arroces como ingredientes y manera de preparar existen, pero estos son los más típicos que encontrarás en la Villa de Altea.
Cocas y empanadas
Además de los arroces Altea también tiene sus tradicionales cocas “a la llumà”, término que viene dado por una caña que se encendía al lado de la coca una vez en el horno. (Esta le daba un toque dorado). Actualmente pueden adquirirse en todas la panaderías de Altea los jueves. Los jueves es el día en que se come este tipo de manjar, a excepción de las fiestas de barrio que suelen ofrecer también un día de sus fiestas esta comida.
También está la coca “farcida” que es una coca tapada a modo de empanada, cuyo interior va relleno de un pisto.
Otro manjar exquisito son los “bollos de bleda” o “bollos de farina de dacsa” son unas empanadas fritas rellenas de espinacas, trocitos de anchoa y trocitos de morcilla. Esta es una comida pesada que suele hacerse los días fríos de invierno.
Los dulces típicos:
En cuanto a los dulces es muy típico los rollos de naranja, las monas en las vísperas de Pascua y los “Pastissets de boniato” para Navidad.
Conservar estas tradiciones culinarias es lo que hace grande y especial nuestra gastronomía local. Todos nuestros platos vienen de la tierra y del mar, llegando a fusionarlos en la gran mayoría los casos. Muchos son los restaurantes alteanos que preparan estas comidas tan elaboradas, cuidadas y conservadas. Te esperamos para que seas participe de nuestra cultura gastronómica.