DEL 23 DE JUNIO AL 2 DE JULIO
Cada barco y falucho alteano era como un pequeño hogar donde vivían los marineros. En medio de sus duros trabajos también tenían su momento de paz a la hora de comer. Entonces uno de los marineros siguiendo las tradiciones mediterráneas y los ingredientes a su alcance obraba el milagro. Así a bordo de las barcas alteanas han viajado “cruets” guisos de pulpo salazones…
Ambas costumbres forman los pilares de la cocina alteana.
Pongamos la mesa para disfrutar de esta experiencia gastronómica multicultural.