Turismo Familiar

 Descubrir Altea en familia es toda una experiencia. Su encanto mediterráneo, sus rincones llenos de historia y sus espacios verdes hacen de este destino un lugar ideal para disfrutar con los más pequeños.

 Paseo del Mediterráneo

Un paseo familiar con vistas que enamoran

Empieza el día con una experiencia única recorriendo el Paseo del Mediterráneo, uno de los lugares más encantadores de Altea. Este camino junto al mar ofrece vistas impresionantes de la costa y del azul infinito del Mediterráneo, ideales para disfrutar en familia.

La playa de cantos rodados que bordea el paseo ofrece un entorno ideal para relajarse, hacer fotos y disfrutar de la brisa marina. A lo largo del recorrido encontrarás bancos y zonas de descanso desde donde contemplar el mar, así como una zona de juegos infantiles con columpios, perfecta para que los más pequeños se diviertan mientras los adultos se relajan y disfrutan del paisaje. Además, en los alrededores hay acogedoras cafeterías y restaurantes donde podréis reponer fuerzas y degustar la gastronomía local frente al mar. Un espacio donde el relax, la diversión y el sabor mediterráneo se combinan en total armonía.

Altea Pequetip: Aunque el paseo es corto, no olvides llevar protector solar, gorras y agua fresca —especialmente para los peques—. El sol suele acompañar durante todo el recorrido, ¡y nada mejor que estar preparados para disfrutarlo al máximo!

Explorando el Centro Histórico de Altea

Desde el paseo, sube con tu familia hacia el Centro Histórico, un laberinto de calles estrechas y empedradas lleno de encanto. Las casas blancas, las flores de colores y las vistas al mar hacen que cada rincón sea pintoresco y fotogénico.

Aunque caminar por las calles empedradas puede ser un pequeño reto para los niños, les encantará descubrir rincones secretos y disfrutar de la atmósfera tranquila y acogedora del Centro Histórico. No te pierdas la Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, famosa por su cúpula azul y blanca, que fascinará a los peques, ni el mirador cercano, desde donde podrán contemplar vistas panorámicas espectaculares de Altea y el mar.

Para hacer la visita aún más divertida, los niños pueden seguir la aventura de Marco Topo, un juego interactivo que los guía por las calles del centro descubriendo pistas, secretos y curiosidades de Altea. Así, mientras exploran, aprenden y juegan al mismo tiempo, convirtiendo cada rincón en una pequeña aventura familiar.

Altea Pequetip: Lleva protector solar, calzado cómodo y agua fresca para los peques. Deja que exploren con libertad y participen en la aventura de Marco Topo: cada calle y cada rincón es una pequeña aventura familiar que no olvidaréis.

 

 

Familia paseando por Altea

 Parque de Sant Pere

Parque de Sant Pere - Naturaleza y juegos

Después de explorar el casco antiguo, una parada ideal es el Parque de Sant Pere, un espacio pensado para jugar y conectar con la naturaleza en el corazón de Altea. Los niños pueden correr, deslizarse por los columpios y disfrutar de los amplios espacios verdes, mientras los padres se relajan en las zonas de sombra y contemplan el entorno.

Con su diseño moderno y seguro, el parque es perfecto para combinar diversión activa y momentos de descanso, creando una experiencia familiar completa y tranquila.

Altea Pequetip: No olvides agua y un sombrero para los peques, y deja que exploren con libertad: el parque ofrece infinitas oportunidades para que los peques jueguen, exploren y compartan momentos en familia.

Sendero Verde - Aventura en bicicleta o patines

Si tus niños disfrutan de andar en bicicleta o patines, el Sendero Verde es una opción ideal. Este recorrido es accesible y conecta Altea con PortoSenso, conectando con puntos de interés, ofreciendo una actividad activa y segura para toda la familia. La ruta es fácil y perfecta para que los peques se diviertan mientras exploran el entorno.

Si no has traído tu equipo, puedes alquilar bicicletas o patines en los alrededores para disfrutar al máximo de la experiencia.

Altea Pequetip: Recuerda llevar protección solar, agua y una pequeña merienda para recargar energías. Aunque el sendero es agradable y seguro, el sol puede ser intenso, especialmente en verano, ¡así que es mejor estar preparados para disfrutarlo al máximo!

 Moli Reial

En Altea también puedes disfrutar de talleres culturales pensados para los niños, propuestas creativas en los centros culturales de la ciudad. Estas experiencias permiten a los peques aprender y divertirse al mismo tiempo, descubriendo el arte y la cultura local de forma lúdica.

Otra opción muy entretenida son las excursiones en barco por la costa de Altea. Durante el paseo, las familias pueden observar la fauna marina, disfrutar del mar y, en algunas rutas, incluso hacer snorkel. Es una manera perfecta de combinar aventura, naturaleza y momentos únicos en familia.

Consejos prácticos para la visita:

Protección solar: Asegúrate de aplicar protector solar de amplio espectro en toda la familia, incluso si el día está nublado. No olvides los gorros, gafas de sol y algo de agua fresca para mantener a los niños hidratados.

Ropa cómoda: La mayoría de las actividades incluyen caminar o explorar, así que lleva ropa y calzado cómodo para los niños. En el caso del sendero verde o el Parque de Sant Pere, unos buenos zapatos para caminar son esenciales.

Planificación de descansos: Aunque el recorrido es apto para niños, es recomendable hacer pequeñas paradas en los parques o en los bancos del paseo marítimo. Los niños pueden cansarse al caminar por el centro histórico, así que es bueno planificar descansos frecuentes.

Alimentos y bebidas: Hay varias tiendas y restaurantes en el centro de Altea donde podrás parar a almorzar o tomar un refresco. Si prefieres algo más informal, puedes llevar un picnic para disfrutar en los parques.