Altea ha dado un paso significativo hacia la accesibilidad universal con la implementación de los códigos NaviLens en diversos puntos de interés turístico y áreas clave de la ciudad. Esta innovadora tecnología de códigos de colores, diseñada específicamente para personas con discapacidad visual, permite una orientación más fácil y autónoma en espacios públicos..
Los códigos NaviLens, reconocibles por sus llamativas etiquetas azules, amarillas y rosas sobre fondo negro, se han instalado estratégicamente a lo largo de las rutas que recorren el Baluarte y el Recinto Renacentista, además de otras zonas relevantes del municipio.
Estos códigos pueden ser detectados desde varios metros de distancia sin necesidad de enfocar directamente la cámara del dispositivo móvil, lo que los hace especialmente útiles para personas con dificultades visuales.
Para utilizar este sistema, los visitantes solo necesitan descargar la aplicación NaviLens en sus teléfonos móviles. Al mover el dispositivo por el entorno, la app emite un sonido de "clic" cuando detecta un código, iniciando automáticamente una locución con información detallada sobre la ubicación, servicios cercanos y orientaciones para desplazarse.
En Altea, los códigos NaviLens complementan otras iniciativas de accesibilidad, como la información turística en Braille disponible en los atriles del frente litoral y la redacción de rutas urbanas en lectura fácil.
Estas medidas reflejan el compromiso del municipio con el turismo inclusivo, asegurando que todos los visitantes, independientemente de sus capacidades visuales, puedan disfrutar plenamente de los atractivos de la ciudad.
La implementación de los códigos NaviLens en Altea no solo mejora la experiencia de los visitantes con discapacidad visual, sino que también posiciona al municipio como un destino turístico innovador y comprometido con la accesibilidad universal.